Actualmente en el Perú, Bolivia, Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile.
Los lugares y regiones sin Sacerdote residente son el campo exclusivo de nuestro apostolado. Allí la gente se queja: "Somos los olvidados".
Un Sacerdote ambulante puede llegar a esos lugares tal vez una vez al año. Hemos hallado algún pueblo donde las personas más ancianas nunca habían visto un Sacerdote. Por ejemplo, un niño que tenía entre 3 y 5 años, su papá lo llevaba a caballo -al otro lado de las cumbres andinas-, para hacerlo bautizar.
Nuestra misión favorece el camino al Sacerdote para que su Ministerio sea fructífero.
